Triunfador_Víctima

A lo largo de nuestra vida vamos acostumbrándonos a una manera de ser y no tomamos consciencia de lo que representan nuestros actos.

Hay una gran diferencia entre presentarnos ante el mundo con un perfil de triunfador o de víctima. Así como afirman los mercadólogos, más importante que la realidad es la percepción de la realidad.

Nuestros amigos nos perciben de alguna manera y nosotros ni cuenta nos damos, pero resulta de alto impacto saber que proyectamos una imagen en un sentido o en otro, por ello, más nos vale tener una idea de lo que está sucediendo con nuestras relaciones más próximas.

 

PERFIL DE TRIUNFADOR

Son personas que proyectan gran confianza en sí mismos, son aplomados, se autocontrolan y manifiestan gran optimismo y energía.

Ríen con facilidad y naturalidad, se relacionan fácilmente, despiertan simpatía en quienes los tratan, son agradables a primera vista y muestran empatía hacia los comportamientos ajenos.

Logran las metas que se proponen, tienen claros sus objetivos y una gran visión hacia un horizonte más lejano que el común de los mortales. Gracias a ello, aprovechan oportunidades con más frecuencia, porque las ven venir con anticipación.

Se hacen responsables de las consecuencias de sus actos. Reconocen sus errores y saben disculparse por ellos, cuando procede, aprendiendo y sacando lecciones valiosas de ellos.

Son proactivos, siempre están dispuestos a emprender con gusto nuevas actividades. Suelen ofrecerse como voluntarios para realizar tareas que surgen en el trabajo o en la casa.

Cuando sufren un fracaso, lo toman como una lección y están prestos a iniciar con mayor fuerza y claridad, aprovechando las lecciones aprendidas gracias al análisis objetivo que llevan a cabo.

PERFIL DE VÍCTIMA

Son personas que evitan la responsabilidad, el ¿por qué yo? brota espontáneamente de sus labios. Pierden el control de sus emociones con mucha facilidad, son irascibles y de trato difícil.

Se quejan de todo, nada les parece bien, se lamentan de que las cosas no sean como a ellos les gustan. Tienen la sensación, y así lo manifiestan, de que el mundo está en contra de ellos.

Cuando se requiere a alguien que tome a su cargo una actividad, intentan evadirla y si no pueden son los últimos en apuntarse, de mala gana.

Estas personas no tienen objetivos claros, suelen manifestar una gran confusión al expresarse. La mirada perdida y la inseguridad permanente los delata.

Suelen remover resentimientos y tragedias pasadas. Miran más hacia el pasado que al presente. El futuro los sorprende con algo que no esperaban, no son previsores.

Las desgracias los persiguen, tienen un imán para atraer lo negativo a sus vidas. Siempre están pensando en que a ellos les sucederá lo que no desean.

Buscan a quien culpar de sus males. Si tienen alguna falla, no la reconocen. Si fracasan, se sienten derrotados y con poca energía para levantarse y seguir adelante.

En el trabajo no cuentan con amigos, se les acercan pocas personas y las que lo hacen muy pronto son objeto de críticas y rechazos de su parte. Concluyen que el mundo no los acepta, ni los quiere.

En síntesis, a todos nos sucede en distintos momentos de nuestra vida adoptar alguna de estas conductas, es parte de nuestras atribuciones como seres pensantes el decidir la postura que hemos de adoptar. Si caemos en alguna que forma parte del conjunto de víctima, debemos hacer hasta lo imposible por pasar a la posición de triunfador.

Todos en la vida queremos gozar de la aceptación de los demás y sentirnos bien con nosotros mismos, de modo que abandonar nuestras reacciones a lo que surja, en vez de tomar posesión y control de nuestras emociones puede ser una alternativa que siempre conduzca nuestra vida por un mejor derrotero.

Amigo lector, te invito a que subrayes algunas conductas que descubras su presencia en tu comportamiento cotidiano. Si tienes algunas que te delatan como víctima, comienza a proponerte el cambio que te llevará por otro camino.

¡HASTA EL PRÓXIMO MIÉRCOLES!

 

¡QUE LA FUERZA DE TU INSPIRACIÓN IMPULSE TUS PROYECTOS!

 

Alfredo Esponda Espinosa
alfredo-esponda@cencadedigital.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.